Entre las organizaciones que han mostrado su descontento se encuentran el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Partido Liberal Reformista (PLR), Partido Popular Cristiano (PPC), Partido Unidad Nacional (PUN), Partido Primero la Gente (PPG), Partido Nacional. Voluntad Ciudadana (PNVC), Partido Demócrata Popular (PDP), el Movimiento Democrático Alternativo (MODA), y Alianza País. También destacan otras agrupaciones como el Partido Revolucionario Independiente (PRI), Partido Verde Dominicano (PASOVE), Alianza por la Democracia (APD), Partido Cívico Renovador (PCR), Unión Demócrata Cristiana (UDC), Movimiento AGUILA, y el Movimiento Nosotros Pa. ‘Cuando.
Un compromiso pendiente
El descontento surge de la percepción de que los compromisos acordados en la alianza que llevaron al PRM a la presidencia no han sido honrados.
Estas organizaciones habían apostado por ocupar espacios de poder en el gobierno, participando activamente en la campaña electoral y prometiendo a sus militantes un lugar en el escenario político y gubernamental.
Sin embargo, tras varios meses en el poder, los cargos y promesas siguen sin materializarse, generando un clima de incertidumbre y malestar entre los dirigentes y las bases de estos partidos.
Impacto en las Alianzas Futuras
La falta de respuesta por parte del gobierno no solo afecta la moral de los aliados, sino que podría tener repercusiones en futuras alianzas y elecciones.
El PRM se encuentra en una posición delicada, ya que el apoyo de estas organizaciones fue clave en su triunfo electoral. Si no se atienden las demandas de los partidos aliados, el escenario político podría cambiar restrictivamente de cara alas elecciones del 2028
La respuesta del oficialismo
Hasta el momento, el gobierno ha guardado silencio ante las quejas de los aliados, lo que ha incrementado el sentimiento de frustración entre los dirigentes.
Las organizaciones políticas aliadas esperan que el presidente Luis Abinader y su equipo cumplan con los acuerdos establecidos para evitar una ruptura en la coalición. Sin embargo, el tiempo corre, y la paciencia de estos partidos se agota.
El futuro de la relación entre el PRM y sus aliados dependerá en gran medida de la capacidad del gobierno para honrar sus compromisos politicos.