Caracas, Venezuela.- VenApp es una aplicación creada por el Gobierno venezolano, que en algún momento tuvo la intensión de crear puentes entre los ciudadanos y las instituciones del Estados. Sin embargo, desde su lanzamiento en 2022, esta herramienta levantó dudas acerca de los niveles de seguridad que ofrecía y sus posibles usos.
La tarde este martes 30 de julio, VenApp experimentó un renacer tras la mención especial que le hizo Nicolás Maduro. Un renacer que no duró mucho tiempo, pues las plataforma de App Store y Play Store la han inhabilitado, luego de que la habilitaran para recibir denuncias de forma anónima sobre las protestas en Venezuela.
La caída de una nueva funcionalidad
En una reciente actualización de VenApp el gobierno añadió una controvertida opción. Esta nueva funcionalidad permitía a los ciudadanos aportar los nombres de personas que están protestando contra los resultados electorales anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Según las declaraciones del presidente, Nicolás Maduro, se abriría una ventana especial dentro de la aplicación «1×10 del Buen Gobierno» para recopilar datos sobre aquellos que considera «delincuentes» por atacar al pueblo. «Vamos a abrir una página especial para que toda la población de manera confidencial me ponga los datos de todos los delincuentes que han atacado al pueblo para ir por ellos», afirmó Maduro.
Esta medida ha llevado a organizaciones de derechos humanos y ciudadanos a expresar una ola de preocupaciones. Temen que la nueva función de la aplicación permita realizar denuncias falsas y anónimas contra cualquier persona. Lo que supone un riesgo significativo para aquellos que están ejerciendo su derecho a la protesta, ya que pueden ser señalados sin pruebas concretas.
Riesgos y consecuencias de la funcionalidad
La posibilidad de realizar denuncias anónimas y sin verificación puede derivar en una ola de acusaciones infundadas, afectando la vida de personas inocentes. Además, el gobierno podría utilizar esta medida para intimidar y reprimir a aquellos que desean expresar su descontento. Especialmente ahora respecto a los resultados electorales y las políticas gubernamentales.
Diversas organizaciones no gubernamentales han expresado su preocupación ante esta nueva funcionalidad. Denuncian que la misma podría ser un mecanismo de control social y represión política, violando los derechos fundamentales de los ciudadanos.
«Un representante de una ONG de derechos humanos comentó que esta actualización de la aplicación puede verse como una herramienta de persecución política y represión social. Poniendo en riesgo la integridad de aquellos que simplemente ejercen su derecho a protestar.»
La toma de acción
Ante este panorama, se hizo un llamado a la comunidad internacional y a los organismos de derechos humanos para que se mantuviesen vigilantes ante posibles abusos. Las organizaciones instaron al gobierno a reconsiderar esta medida. Así como garantizar que la aplicación no se utilice para silenciar voces disidentes ni para violar los derechos humanos de sus ciudadanos.
Aunque no se conoce quién respondió esta solicitud, lo cierto es que las plataformas App Store y Play Store inhabilitaron la aplicación.